Desintoxicar
el cuerpo, no es liberarnos de azúcares, grasas y esas cosas que no nos hacen
bien; es liberarnos de enfermedades, gordura y problemas que tienen su origen
en la mente.
Ser
libre es quitarse los pretextos, los miedos y los malos pensamientos. Hacer un
cambio desde adentro que se refleje hacia afuera, que vale la pena, a través de
la magia de “sonreír y ser feliz”.
Las emociones son los que
nos hacen ser de una forma y no de otra. Los sentimientos nos permiten ser como
somos, aunque nuestras experiencias también tienen su parte de responsabilidad.
Lo
no conveniente es, vivir siempre “recordando” los sentimientos del
pasado, eso produce un proceso químico, que una y otra vez, genera consecuencias
emocionales y sentimentales que a su vez provoca cambios en el comportamiento y
conducta del ser humano.
Una de las preguntas que te
puedes hacer para darte cuenta si realmente debes o no cambiar o programar
nuevamente tu cerebro es ¿Cuál es el sentimiento que me invade cada día,
sirviendo como excusa perfecta para no modificar nada?
Pudiendo así detectar cuales
pensamientos debes librar de todo aquello que te destruye, que te encierra, te
enjaula o te tiene prisionero. Los estados anteriormente nombrados son los que
te impulsan a comportarte de una manera agresiva, con ira o de miedo constante.
Pregúntate, ¿Qué es lo que
puedes cambiar de ti mismo para ser una mejor persona o cuál es el mayor ideal
que puedes o quieres alcanzar?
Tú, eres el único
responsable de lo que te ocurre porque puedes cambiar tu mentalidad para crear
nuevos senderos por los cuales el cerebro transite de forma más tranquila o, al
menos, diferente a lo conocido.
No le tengas miedo a lo que
no conoces o no sabes, no tiene que ser malo lo desconocido en el 100% de los
casos. Está comprobado que el cerebro es capaz de ayudar a curar las
enfermedades más dañinas, como pueden ser el cáncer o la diabetes.
Los pensamientos se convierten
en materia, según los científicos más prestigiosos del mundo. Las personas
tienen la capacidad de cambiar la arquitectura del cerebro. “De
ello no hay dudas”.
Recuerda #NoCambieslaFormula
y
Namaste, Carpe Diem y que la
“Fuerza los Acompañe”…
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